La vida en la ciudad es tormentosa e imprevisible. Caminando por las calles de la ciudad se puede ver su alma, calentada por los rayos del sol e iluminada por las sonrisas de los habitantes.
La vida en la ciudad es tormentosa e imprevisible. Caminando por las calles de la ciudad se puede ver su alma, calentada por los rayos del sol e iluminada por las sonrisas de los habitantes.